En los últimos años el tratamiento de diseño de sonrisa ha ganado popularidad, cada vez somos más conscientes de la importancia de una dentadura estéticamente agradable para proyectar una mejor imagen personal, además de brindar mayor confianza y seguridad al hablar. Sin embargo, no muchas personas tienen claridad de los tipos de diseño que hay en el mercado y la diferencia entre cada uno de los procedimientos, qué resultados esperar, cuánto tiempo dura y cómo cuidarlo para evitar manchas. Te contamos a detalle toda la información que debes conocer para que elijas la mejor opción para ti.
¿Qué hace un diseño de sonrisa?
El objetivo principal de un diseño de sonrisa es corregir problemas de mordida, de alineamiento dental, aliviar afecciones comunes de salud oral como las caries, enfermedades en las encías como la gingivitis, o los cálculos dentales. También se encarga de corregir problemas estéticos como los dientes manchados, amarillos, agrietados o desgastados, y cualquier detalle que represente una inconformidad al sonreír.
Un diseño de sonrisa con resultados exitosos tiene impacto incluso en la digestión de las personas, ya que el dolor al masticar, la inflamación en las encías, piezas dentales sueltas o torcidas, el sangrado al cepillarse o al usar el hilo dental, y la sensibilidad a ciertas temperaturas impiden una correcta masticación, indispensable para un sistema digestivo saludable.
Si presentas halitosis, es decir, mal aliento, y su causa está relacionada a la salud oral, lo más probable es que, luego de realizarte un diseño de sonrisa adecuado para ti, este problema desaparezca por completo. Recuerda que una rutina constante y diaria de cepillado e higiene bucal previene que estas afecciones regresen y se conviertan en malestares recurrentes.
¿Cuáles son las consecuencias de un diseño de sonrisa?
Las consecuencias que llegan a tu vida luego de un tratamiento de diseño de sonrisa son múltiples, la inconformidad con la apariencia dental o el dolor causado por estos problemas de salud tienen un impacto en tu autoestima, en la seguridad y en tu libertad para expresarte o reírte.
Además de las evidentes mejoras en términos de salud e higiene, puede favorecer aspectos que parecen no tener relación con tus dientes, por ejemplo, tu calidad de sueño. ¿Sabías que una de las razones más comunes por las que las personas presentan desgaste en los dientes, fracturas, o mal posicionamiento de la mordida es el conocido bruxismo? Este reflejo inconsciente de apretar, rechinar y crujir los dientes puede ocurrir durante el día, pero, por lo general, es un reflejo de una sobrecarga de estrés al dormir.
Los humanos somos, por naturaleza, seres sociales. Esto significa que inevitablemente la apariencia, nuestra imagen frente a los demás, nuestras capacidades al desenvolvernos en espacios públicos, las herramientas que ponemos en práctica al hablar y la percepción de nuestros círculos cercanos tienen un impacto en nuestra autoestima, seguridad e identidad.
Esto explica por qué la sonrisa es una de las características más llamativas y memorables de las personas, en especial cuando queremos causar una buena primera impresión, ya sea en entornos profesionales o personales.
Tener dientes torcidos, montados, agrietados, amarillos o mal alineados genera una distracción inmediata en la conversación, sobre todo porque tu postura, la seguridad de tus palabras y la entonación de tu voz pueden cambiar drásticamente si estás preocupado por ocultar estas imperfecciones cada que quieres comunicarte.
Las personas a tu alrededor notarán un cambio inmediato en tu comportamiento, disfrutar de la libertad de sonreír sin miedo te permitirá expresar tus emociones de forma mucho más genuina y asertiva. Pero eso no es todo, contar con un alineamiento en la zona de tu boca creará un efecto visual de armonía y proporción en el resto de tu rostro.
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¿Qué tiempo dura el diseño de sonrisa?
Iniciemos por entender que la duración de un diseño de sonrisa no es estándar para todo el mundo, depende de los profesionales que hayas elegido para realizarte el tratamiento, la calidad de los materiales, el tipo de procedimiento que sea ideal en tu caso y, sobre todo, los cuidados que lleves a diario una vez tu diseño esté terminado, desde la alimentación hasta evitar hábitos perjudiciales como fumar.
Dicho esto, la vida útil que se espera de cada tratamiento recae principalmente en el material que se use. Se espera que un diseño de sonrisa hecho con carillas de resina mantenga su funcionalidad y apariencia por un periodo de 5 a 10 años, mientras que, si eliges carillas de porcelana, este periodo puede ser de 10 a 15 años. Sin embargo, hay que tener en cuenta que durante este lapso de tiempo tus carillas pueden necesitar algunos mantenimientos pequeños para alargar su duración.
Aunque un diseño de sonrisa no dura toda la vida, está pensado para que tenga la misma funcionalidad y resistencia que los dientes naturales, pero, debido a que las carillas no cambian de color —a diferencia del hueso natural de cada uno de tus dientes— y son un poco más frágiles debido a sus materiales, deben ser reemplazadas para mantener los resultados.
¿Cómo se realiza un diseño de sonrisa?
Aunque cada persona tiene dientes únicos con necesidades particulares, existen ciertas pautas generales que se incluyen en la realización de todo diseño de sonrisa. Por lo general, y en especial en años recientes, relacionamos este concepto con las famosas carillas, pero este no es el único camino viable para muchos pacientes.
Otros procedimientos odontológicos pueden ser el primer paso para lograr esa sonrisa que tanto sueñas, por ejemplo, la ortodoncia, la periodoncia, la implantología y el blanqueamiento dental. Cada uno de estos tratamientos pueden representar el diseño de sonrisa en su totalidad, o pueden ser llevados a cabo en conjunto para mejores resultados, todo depende de la situación de cada boca.
Es necesario solucionar ciertos aspectos antes de considerar las carillas, desde las malformaciones en los huesos de la mandíbula, la mordida y las piezas dentales, la irritación y complicaciones en las encías, y el implante de dientes que se hayan perdido con anterioridad o que deban ser reemplazados.
Para identificar con exactitud cuáles son los problemas a solucionar, se realiza un estudio del entorno bucodental en general. Esto significa que tu odontólogo realiza un chequeo de toda tu boca, identificando caries, placa dental, desgaste o cualquier anomalía.
Una vez solucionadas todas las irregularidades, se procede a realizar cambios o ajustes en la forma y el tamaño de tus dientes. Con este paso se busca brindar una línea uniforme y estética, sin perder la naturalidad de la sonrisa característica de cada persona.
Por último, pero no menos importante, debes llevar un estricto cuidado de tu diseño de sonrisa una vez sales del consultorio de tu odontólogo. Alejarse de alimentos crujientes o duros es el primer paso, evitar hábitos como morderse las uñas o llevarse lápices y llaves a la boca, y, por supuesto, no utilizar los dientes para abrir ningún empaque ni botella. No hay que dejar de mencionar los alimentos más conocidos por manchar los dientes, sin importar si tienes carillas o no, como son las gaseosas oscuras, las bebidas azucaradas, el café, el cigarrillo y mascar tabaco o hierbas aromáticas.
¿Qué mancha el diseño de sonrisa?
En este punto sabrás que una de las más grandes vulnerabilidades y cuidados que debes tener con tu diseño de sonrisa es en torno a las manchas. Como ya te contamos, los dientes naturales se manchan si comemos bebidas oscuras y, con el tiempo, el tono amarillo que adoptan es relativamente uniforme a lo largo de todas las piezas. Lo mismo no ocurre con las carillas, las manchas que quedan en ellas no se mimetizan con el resto de tus dientes y son mucho más notorias; algunos de los elementos que debes evitar para que esto no ocurra son:
- Refrescos y gaseosas oscuras.
- Vino tinto.
- Café.
- Algunos tipos de té.
- Dulces o snacks altos en colorantes.
- Cigarrillo.
- Mascar tabaco.
- Salsa de soya.
- Vinagres cítricos.
- Bebidas energéticas por su alto contenido azucarado.
- Cacao puro.
- Verduras y frutas de color intenso, como la remolacha y la mora.
Y así como estos alimentos afectan de forma negativa el diseño de sonrisa, existen algunos que puedes consumir con frecuencia para mantener el tono crema intacto y potenciar el brillo de tus dientes.
Los aliados de una sonrisa resplandeciente son:
- Lácteos: yogures, quesos y leche.
- Frutas y verduras, en especial la manzana, la zanahoria y la espinaca.
- Cepillado 3 veces al día.
- Uso de seda dental mínimo una vez al día.
- Visitas con tu odontólogo cada 6 meses.
Tipos de diseño de sonrisa
En este punto debes estar preguntándote qué tipo de diseño de sonrisa es ideal para ti y entre cuáles tipos puedes elegir. Aunque en el mercado hay disponibles varias opciones, recuerda que debes tomar esta decisión de la mano de tu odontólogo de confianza y siempre acudir a profesionales de la salud oral con experiencia en diseño de sonrisa, esto garantizará que los resultados sean satisfactorios y salgas de tu procedimiento orgulloso al sonreír.
Con base en la complejidad de las imperfecciones que quieras solucionar y el estado general de tu higiene bucal, puedes requerir de uno o más procedimientos para alcanzar ese brillo que quieres. Si quieres que la transformación de la apariencia de tu sonrisa sea evidente, quieres hacer cambios enfocados en la forma y tamaño de tus dientes, el camino que te recomendará un profesional es el de las carillas; estas pueden realizarse con resina o porcelana.
Diseño de sonrisa con resina
El diseño de sonrisa con resina consiste en agregar finas capas de resina sobre la superficie externa del diente, logrando un alineamiento, blanqueamiento y uniformidad al sonreír. Tiene efectos inmediatos de restauración, mejora de mordida y estabilidad en el color.
Diseño de sonrisa con carillas
Por lo general, el precio del diseño de sonrisa con carillas es un poco más alto debido a que puede durar hasta 5 años más que la resina. Consiste en un tallado sobre los dientes para igualar la mordida, seguido de la instalación de finas láminas de porcelana, conocidas como carillas, que igualan y mejoran el tono.
Diseño de sonrisa no invasivo
Para los casos más sencillos, es común que se realice un procedimiento de diseño de sonrisa no invasivo, este consiste en tratamiento de blanqueamiento, eliminación de caries y exceso de encía, micropulido de los bordes dentales, o corrección de manchas en el esmalte a través de un tratamiento de microabrasión.
Diseño de sonrisa por ortodoncia
El diseño usando tratamiento de ortodoncia consiste en alinear los dientes y corregir su ubicación, para mejorar su estética y funcionalidad al masticar. No se altera la forma ni el tamaño de los dientes, sólo su alineación. Al retirarse los brackets, se completa con una limpieza y un blanqueamiento.
Diseño de sonrisa complejo
En algunos casos especiales se necesita combinar dos o más procedimientos de diseño de sonrisa, puede requerirse la intervención quirúrgica de varios especialistas si es necesario remodelar el hueso.
Beneficios del diseño de sonrisa
Para finalizar, te recordamos la lista de algunos de los beneficios más llamativos que trae un diseño de sonrisa:
- Aumento en la confianza y la autoestima.
- Seguridad al hablar y reír.
- Comodidad y funcionalidad.
- Mejoras en la digestión gracias a una correcta masticación.
- Eliminación de mal aliento.
- Corrección de la mordida.
- Eliminación de caries, placa dental y cálculos.
- Alineación de los dientes.
- Apariencia estética, armoniosa y natural.
- Tono equilibrado y unificado en todos los dientes.
- Corrección de manchas.
- Solución de desgaste dental y agrietamiento.
Ahora que conoces a profundidad los detalles sobre los tipos de diseño, ¿cuál es la opción ideal para ti? Agenda una cita con Arte Oral para descubrir todo el potencial y brillo que tiene tu sonrisa.
